LISTERIA: la vecina que NO has de conocer

fuente:betelgeux.es
La listeria monocytogenes es una bacteria patógena de transmisión alimentaria, es lo que se conoce como un “patógeno emergente” lo que significa que a efectos de su incidencia en la población actualmente ésta no es demasiado representativa pero que en un futuro podría escalar puestos hasta ser responsable de un mayor número de toxiinfecciones alimentarias.
La infección que produce se llama Listeriosis, una infección severa con síntomas variados como fiebre, vómitos y diarreas, dolores musculares, debilidad, rigidez de cuello o confusión mental. En casos extremos como el que hemos podido sufrir este verano por la carne mechada puede producir abortos en mujeres embarazadas especialmente en el primer trimestre de la gestación e incluso la muerte por consumo de alimentos contaminados.
La contaminación es más susceptible en carnes y pescados procesados o cortados y envasados en industria alimentaria ya que son alimentos muy nutritivos para ella, además una característica excepcional de esta bacteria es aparte de su alta patogenicidad, es que puede crear lo que se denomina “biofilms”, una especie de película adherente compuesta por proteínas que ella misma sintetiza. Estos biofilms hacen que las bacterias puedan adherirse a todo tipo de superficies, incluso a las supuestamente inertes, como el acero inoxidable, lo que la hace especialmente peligrosa para la industria alimentaria
Mecanismos de prevención para evitar listeriosis
En Industria Alimentaria:
Correcto control de recepción de la materia prima
Correcta estiba y conservación a la temperatura correspondiente
Correcta preparación del alimento
Correcta elaboración del alimento y de sus complementos (salsas, etc)
Limpieza y Desinfección correcta de toda la maquinaria de acero inoxidable implicada (picadoras, cortadoras, tuberías para salseo, etc…)
En definitiva, una correcta aplicación y vigilancia del sistema APPCC
En casa:
Si estás embarazada: no consumas ningún producto crudo (carpaccios, sushi, etc), ni semicrudo (marinados, ahumados), haya sido o no congelado y tampoco productos loncheados o picados de manera industrial, (por ej jamón York o queso de burgos) compra piezas enteras y trocéalas en tu domicilio teniendo cuidado de limpiar y desinfectar correctamente los utensilios (tablas y cuchillos) ya sea en el lavavajillas o con agua y jabón y posteriormente con lejía apta para uso alimentario.
En todo caso en tu domicilio mantén las normas básicas de higiene alimentaria, correcta manipulación y conservación de alimentos, evitar las contaminaciones cruzadas, usar utensilios limpios y desinfectados, etc.
Todas estas dudas y otras más puedes resolverlas con los profesionales de Hezi